Por Paty Monroy
Alguna vez me realicé un autotesteo de pares psicoemocionales, con el Método “Tapia”, los anoté, impacté uno a uno los marcados y me sorprendí al hacer la lectura de la emoción encontrada, fuertes golpes al subconsciente recibí cuando me dí cuenta que empecé a preguntarme y peor aún a responderme: ¡¿Qué?!, ¿A quién?, ¿Por qué?, ¿Desde cuándo?, ¿Dónde?... entonces decidí experimentar la práctica de esta terapia haciendo a algunas amistades el mismo tipo de preguntas que yo me había hecho durante la misma y de las que hablaré más adelante.
Alguna vez me realicé un autotesteo de pares psicoemocionales, con el Método “Tapia”, los anoté, impacté uno a uno los marcados y me sorprendí al hacer la lectura de la emoción encontrada, fuertes golpes al subconsciente recibí cuando me dí cuenta que empecé a preguntarme y peor aún a responderme: ¡¿Qué?!, ¿A quién?, ¿Por qué?, ¿Desde cuándo?, ¿Dónde?... entonces decidí experimentar la práctica de esta terapia haciendo a algunas amistades el mismo tipo de preguntas que yo me había hecho durante la misma y de las que hablaré más adelante.
Nuestro
cerebro “dividido” tiende a buscar el lugar menos pensado para esconder o
“enterrar” aquéllos recuerdos dolorosos, bochornosos y hasta vergonzosos,
obviamente con sus respectivas emociones, porque desde siempre estamos
acostumbrados y educados para olvidar y ocultar aquello que pensamos nos hace
daño… nooooo…. no debe ni tiene por qué seguir siendo igual…
El
objetivo principal del biomagnetismo es eliminar virus, hongos, bacterias y
parásitos, así como restablecer el ph de nuestro organismo…. Y precisamente son
las emociones las que crean el terreno propicio para el desarrollo de
patógenos y el desequilibrio de nuestro ph; al mantenerlas escondidas, no
hacemos más que incrementar el riesgo de enfermarnos.
Entonces,
¿por qué no permitimos a esos recuerdos con sus emociones, con sus olores y
sabores acompañarnos por unos minutos y dedicarles un poco de atención?
Vale la
pena ir al pasado y recordar, reconocer que en alguna parte de nuestro cuerpo se
hallan alojadas emociones que no hemos querido enfrentar ni reconocer… a veces
suelen aparecer dentro de un pensamiento o remembranza… es a partir de esto que
inicié experimentando con mi propia terapia.
La RMI
(Respuesta Muscular Inteligente) de mi primer “conejillo de Indias” que marcó
Pares Psicoemocionales, reportó entre otros: “Miedo a volverse loco” y “Culpa”,
cuando le impacté cada par de imanes le pregunté en voz alta: “¿Por que crees
que te volverás loca? ¿Qué o quién te infunde ese pensamiento?… ¿Qué te hace
sentir culpable?... abrió los ojos y preguntó: “¿Cómo lo sabes, eres bruja?”…
por supuesto que no, tu cuerpo me lo dijo, respondí.
Ahora –le
dije- mientras te dejo los imanes, quiero que mantengas los ojos cerrados y en
silencio, evoques ese recuerdo y esas emociones que estas preguntas despertaron
en ti. Enfrenta ese recuerdo y has consciente las emociones que incluye…
Mientras transcurría el tiempo de impactación la vi llorar y a veces reír.
Pasado el
tiempo retiré los imanes, tomó su vaso de agua y preguntó si tenía que decirme
su sentir al respecto, le dije que no…. Finalmente me contó que su marido y una
de sus hijas habían muerto en un accidente automovilístico, que ella iba
manejando (culpa); que recordó detalles del accidente, el olor de la
sangre, la ambulancia, el trayecto al hospital, etc., cosas que olvidó (o más
bien encerró) durante casi diez años. Manifestó que le parecía a veces verlos
en casa recriminándola o burlándose de ella (temor a volverse loco)
Desconoce el sentir de sus otros dos hijos (que ya hacían una vida
independiente) y que teme perder la fortuna y posición que le dejó su marido.
Al respecto, en sesiones anteriores se marcaba una infección urinaria
recurrente con cólicos nefríticos obviamente asociados al temor a perder dinero
y a la soledad. Finalmente su afección renal desapareció!!!
Así como
ella, otras personas que experimentaron con esta terapia, se dejaron llevar y
dejaron emerger sus emociones más profundas...Sigo haciendo la terapia de pares
psicoemocionales de esta manera: con preguntas a las que he llamado de “choque”
y los resultados han sido verdaderamente impresionantes y “sin rebote”
como solía suceder en mis primeras terapias, cuando entonces pensaba: “los
pares psicoemocionales no funcionan, nunca han sido comprobados”.
Psicoanalistas,
escritores, motivadores se han cansado de repetir y recalcar la importancia de
vivir el hoy, el presente… y citan las frases trilladas de que “el pasado ya se
fue, el futuro aún no llega…” y tienen razón, pero sin duda para vivir el hoy
en plenitud, hay que hacer una limpieza desde el ayer… hay que sanar desde el
pasado y en adelante desde nuestro presente… sacar de nosotros mismos fuerza,
carácter y valor necesarios para no dejar ir la emoción y por un momento
mirarla como si fuera otra persona y preguntarle, hablarle, gritarle y hasta
golpearla... finalmente reconocerla y aceptarla como parte nuestra.
En fin…
esto solamente es un punto de vista y experiencia personal que me ha
funcionado. Siempre he sostenido que cada terapeuta puede poner a prueba su
creatividad, definir y establecer su propia estrategia.
hola muchas gracias por compartir tu tecnica,pues yo tambien trabajo el biomagnetismo medico y el psicoemocional,en donde he investigado si ese comportamiento tiene que ver con algun ancestro ya sea que haya muerto o no y son srprendentes los resultados,y lo que tu haces es como si hicieras una especie de desvinculacion biologica
ResponderEliminarmuchas gracias
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