lunes, 2 de diciembre de 2013

Entendiendo las terapias magneto-energéticas


El origen de las enfermedades



La física moderna nos enseña que todo está compuesto de energía. Esta energía fluye por conductos regulares en un orden originalmente armonioso y equilibrado. Diversas situaciones de la vida diaria, hábitos, pensamientos y emociones perturbadores, alimentación, entre otras causas, pueden producir la pérdida de ese equilibrio, por acumulación, déficit o bloqueos en diferentes puntos del sistema energético, interfiriendo en la adecuada circulación del flujo energético vital y dando paso posteriormente a diversos trastornos, dolencias y enfermedades.


Nuestro cuerpo es un universo que funciona con la misma perfección, precisión e inteligencia que el cosmos…somos vacío y energía vibrando armónicamente… por lo tanto síntomas y enfermedades son manifestaciones físicas de desequilibrios energéticos de distintos tipos, de los que hablaremos más adelante…


Síntomas y enfermedades son un sistema de alarma, un toque de atención, un aviso del Universo para hacer cambios en nuestro diario vivir, nuestra forma de pensar y sentir… la verdad se oculta en nuestro subconsciente… 


La fiebre por ejemplo, en realidad, no sólo acelera el proceso de curación, sino que nos está sanando… pero para sanar efectivamente hay que mirar hacia nuestro interior y buscar el origen de la enfermedad que solo es el camino hacia la curación, nos ayuda a reparar nuestros errores y carencias, si no podemos por nosotros mismos, busquemos a un terapeuta profesional.


Qué son las terapias magneto-energéticas y cómo funcionan?


Las terapias magneto-energéticas son técnicas basadas en la aplicación de esa energía maravillosa, con el objeto de restaurar el equilibrio y la armonía física, mental, emocional y espiritual de la persona. 


Actúan reactivando la comunicación de los canales energéticos en el cuerpo físico y restaurando el flujo electromagnético entre las células, lo que revierte en un mayor bienestar a todos los niveles y proporciona la base para la integración armoniosa de cuerpo, mente y espíritu.


El terapeuta y estas técnicas actúan como un canal para el flujo energético y un catalizador. No obstante, es el propio individuo quien tiene la capacidad de transformar su estado gracias a la nueva frecuencia, pudiendo restaurar un equilibrio duradero en su organismo a nivel integral.


Las técnicas magnetoenergéticas actúan restaurando el flujo energético vital. En ese sentido son un apoyo complementario a los tratamientos médicos convencionales. Los terapeutas especializados en éstas, se auxilian de otras alternativas para lograr la reintegración mente, cuerpo y espíritu, tales como la cristaloterapia, la musicoterapia, la aromaterapia, etc.


Conexión terapeuta paciente


Existen terapias que justamente proponen la concientización de la unidad que realmente somos de cuerpo-mente-espíritu, pero no sólo del paciente, sino también del terapeuta. Este debe trabajar continuamente en su propia alineación, a fin de crear el espacio necesario para que el proceso de sanación ocurra. Se trata de establecer una comunicación fluida de Ser Interior a Ser Interior, en la que ambos se enriquezcan y sanen mutuamente.


Un verdadero terapeuta en estas técnicas no se deja llevar por reglas fijas de tecnicismos, sino por la escucha intuitiva y abierta de las necesidades profundas del paciente, para poder así abrir canales que le faciliten el acceso a su propia fuente interna de sabiduría y bienestar. Para ello, el terapeuta utiliza algunos de los métodos citados, sin atarse a ellos en forma dogmática, ya que la flexibilidad en la respuesta es su don.


Cada persona es diferente y atraviesa distintas etapas, en las que el terapeuta deberá considerar ciertas herramientas psicológicas tales como: exteriorizaciones emocionales, reflexiones, energía, conexiones espirituales o quizás bailar o dibujar, todo sin olvidar jamás que somos una unidad, manifestada en un cuerpo físico.


Para hacer posible tal integración de cuerpo, mente y espíritu, el terapeuta realmente profesional y comprometido, explora diversos y distintos tipos de disturbios energéticos en los que como indicamos al principio de esta nota, se encuentra el origen de las enfermedades… la siguiente es una tabla sobre la que los terapeutas de Manik nos guiamos a fin de cuestionar, conocer, y evaluar de la mejor manera la salud física, mental y espiritual de nuestros pacientes y ayudarlos efectivamente a sanar…



Energía
Qué nos afecta?

Ambiental
Contaminación, polen, toxinas, químicos, fertilizantes, metales pesados, computadoras, celulares, campos electromagnéticos, aparatos eléctricos, geopatías, cosméticos, plásticos, fibras, detergentes, suavizantes, jabones, etc.
Física
Fatiga, digestión, circulación, nervios, músculos, columna, sistema hormonal, medicamentos, sobrepeso, alergias a alimentos, vacunas, disfunción glandular, etc.
Mental
Patrones repetitivos de pensamiento, pensamientos negativos, preocupaciones, déficit de atención, hiperactividad, etc.
Emocional
Depresión, miedo, ansiedad, angustia, codicia, orgullo, tristeza, soledad, confusión, abandono, familiar enfermo o inestable, etc.
Psicológica:
Autoestima, crisis de identidad, plan de vida, carrera, patrones adictivos, traumas del nacimiento, de la infancia, etc.
Espiritual
Culpa, pena, perdón, moralidad, sentido de la vida, miedos desconocidos,  temor a la muerte, entidades interferentes, etc.
Social
Relaciones con familia, amigos, con esposa, esposo, orientación de los hijos, estrés social de los adolescentes, estatus, amistades, etc.
Laboral
Sobrecarga de trabajo, estrés por promoción de puestos, por competitividad, por el jefe y los colegas, por conservar el trabajo, relaciones con compañeros, etc.
Financiera
Flujo, ahorro, deudas, tarjetas de crédito, bolsa de valores, plan de jubilación, expansión en el estilo de vida, pagos, gastos imprevistos, etc.
Política
Terrorismo, narcotráfico, inseguridad, estrés inducido por los medios de comunicación, elecciones, incertidumbre del futuro del país, guerras, etc.
Alimenticia
Comidas rápidas, comidas mal procesadas, uso de microondas, calidad nutritiva del alimento, cantidad de agua que se bebe
Agentes Patógenos
Bacterias, virus, hongos, parásitos,